sábado, 5 de diciembre de 2009











UNo sE ecHa aL mAr TraTaNDo de EnCONtrar eL SoSiEgO.

PerO el MAR y lA TieRRa es Lo MiSmO,

en NingunA partE se eNcUeNTRa la CALma.


Yokio Mishima

Faltan los créditos fotográficos  por cuestiones de desorganización y pérdidas.

martes, 1 de diciembre de 2009

Desencanto dominical



















Algunos domingos mi economía está de suerte, entonces me dirijo al puesto de periódicos y compro El País. Mi madre me enseñó a leer esa publicación a lo largo de mi adolescencia cada fin de semana religiosamente había un ejemplar en casa.
Y como es mi costumbre un día ya citado acudí a comprar dicha publicación, no me encontraba en una ruta conocida pero deseaba leer, entonces me acerqué al primer puesto que encontré y pregunté:

-¿Disculpe vende El País?
El tendero negó con la cabeza, pero un transeúnte que se encontraba allí respondió
 -Ese lo vende Calderón.-

Me marché un poco enojada, después reí mucho, es claro que ya nadie quiere a ese espécimen y el rencor social se ha gestado.

País ¿y tu devenir?
Auxilio, no deseo emigrar, un atlas, un paracaídas...

NOO, mejor zen ¡armas mentales a la carga! ¡Praxis a la carga!

"Se dice a veces que la política es demasiado importante para dejársela a los políticos".

Espero que todos, todas, todes, todis, todus los que votaron por Fox y dejaron que FECAL y Cia. se robaran la elección  nutran su alma y asuman su responsabilidad social. 

Chale!!!! no quisiera irme de este país, desde que nací el territorio está en crisis ¿cuándo será el fin?

Refrán zen
Fotografía de: Schmelling, Michael. From The Plan, Untitled (Howay Doody), 2007. C - print.

Ataque de escritura




Es uno de eso días en lo que no puedo parar de escribir, es un ataque de escritura, la mente vuela y las ideas desordenadas salen sin importarles ninguna regla sintáctica.

Desean correr y deslizarse por la bolilla, de la tinta al papel, de la energía eléctrica al ordenador.
 Apenas empiezo con unas letrillas y el cerebelo concluye ideas, no sé de qué manera explicar este desorden, sólo sucede: estado comatoso.

Palabras, ideas: no hay cohesión, sólo tinta que se impregna sin parar.

Fotografía de: Davey Moyra, Paysage, C - print.

Entrada sin título que versa de la añoranza y la soledad





Me gustan los árboles a la mitad de la calle que irrumpen el asfalto. Extraño Coyoacán, el olor a café de El Jarocho, los empedrados, la carga oscura y pesada que vibra al caminar en algunas aceras como la de Francisco Sosa, los callejones, la arquitectura de las casas, la cercanía con la UNAM. Extraño a mi abuela, los días que no volverán, amo ese pedazo de tierra y estoy lejos .

Ayer soñé que mi padre me mataba mientras yo nadaba en el agua negra de una laguna con rocas volcánicas quemándome los pies, el centro de la caja acuática contenía raíces largas, espinosas que conducían a las enormes ramas de un nopal. Disparaba a quema ropa.

En ocasiones siento que he tomado decisiones erróneas y un fragmento de mi sabe que el camino recorrido ha sido prolífico para la mente y el corazón.
Quisiera estar en otro lugar, vamos, no reniego de la estabilidad que empecé a gozar este año, me  refiero a ciertas aspiraciones que  no he logrado culminar o emprender.

También, hay días en lo que he deseado llorar con la furia de un animal, pero el agua salada no emana, se niega a mojar esta dermis facial. Resulta extraño porque de niña y adolescente lloraba con una facilidad sorprendente, después de JA todo se atrofió, la capacidad sensitiva del llanto se ha mudado a otros cuerpos dejando atrás mi ser. 

Esto último esta relacionado con un tipo de soledad que empezó a invadirme, de pronto me descubro sin amigos, la mayoría se marcharon, otros están lejos en sus ocupaciones; principalmente me hace falta la presencia femenina, una amiga con la cual discurrir historias de lo cotidiano, platicar del sexo opuesto y sentir que por allí está alguien en quien se puede confiar.

Fotografía de: Françoise Huguier.